Hemos regesado para este 2019, con nuestra Madriguera, que muta de lo estático, al ser nómada, reinventándose, o mejor, reencontrándose.
Ser nómada no es la ausencia, es saber regresar y conectarse de forma natural, sin forcejeos.
Ser nómada es recorrer varios parajes en distintas "estaciones".
Desde acá vamos aprendiendo que:
En la casa de Hortensia azul despierto liviana para contemplar a Colibrí y a ApamateHortensia parece desfallecer, pero en su casa me hablan de la armonía y el ser diáfano en el actuarSu casa es un hogar fracturado que rehuye del silencio y de la ausencia.que se niega a dejar de ser cálidocon Hortensia azul siento una alegría profunda e inquieta
Entendiendo que ella no es solo casa, no es un lugar, siempre han sido las personas y la vinculación profunda, sincera, amorosa, con los amigos.
El ir conectando en nuevos, o desconocidos espacios y sentir la agitación de estar creando, de agradecer (siempre).
Así comenzamos el año brindando en diversas ocasiones, primero por el amor, la salud, la amistad, y los proyectos, que jamás deben desaparecer.