Vanegas y su Tropical Guetto

Reseña del libro de Fernando Vanegas, "Tropical Guetto", ganador del Premio de Autores Inéditos de Monte Ávila Editores en el año 2014.

Por el contrario, esta es la historia de un joven,
un joven viejo porque luego de los veinticinco
la vida envejece aunque nadie quiera decirlo

Fernando Vanegas

Por Joan Manuel García

Es difícil convencer a la gente que la escritura joven puede andar por ahí sin ese apellido, que un escritor novel puede decir lo que corresponde a su tiempo sin sonar soso o adolecer de juventud. En este pecado incurrí al empezar a leer a Fernando Vanegas y su Tropical Guetto, al encontrarme con una narrativa que hacía eco hacia adentro, pero lo mismo me sucedió cuando leí Demian de Herman Hesse: me alegra decir que me equivoqué.
Tropical Guetto es un libro de cuentos escritos por Fernando Vanegas, quien ganó el concurso de Autores Inéditos de Monte Ávila Editores en 2014, en conjunto con una generación en la que me reconozco y cuyos símbolos comparto. Este libro se compone de nueve cuentos narrados en 80 páginas, impreso en el año 2016 en Caracas y de tiraje desconocido, mantiene el estilo de la colección “Las formas del fuego” de dicha casa editorial, siendo en su sencillez de una belleza agradablemente modesta.
Los textos emanan un ambiente entre la fiesta, el pesimismo, la apatía y la melancolía, parece extraña esta lista de sensaciones pero no es menos cierto que hoy son estos sentires los que imperan entre la juventud que escribe, la cual permanece en crisis y mira de frente los monstruos del presente, inconformes con el mundo que nos ha tocado vivir.
Es así que el cuerpo del texto nos devela la vida de una ciudad próxima a la frontera, una ciudad venezolana y en ella la vida de un venezolano, con personajes identificados invariablemente con nuestro tiempo y con su territorio. Las imágenes se proyectan en nuestros recuerdos a veces confundiéndonos en ellos.

Pasaremos por la frontera y por la labor del educador, afrontaremos a los que creyeron más en la venganza y la violencia como medios para mejorar el mundo, que en los libros y la justicia, esa es una interrogante que nos atraviesa en días en que la violencia parece ser la única salida que ven algunos.

En otros textos asistiremos a algunas fiestas, es oportuno decir que el mérito principal en Vanegas es la capacidad de transmitir emociones, de hacer encarnar empáticamente a sus personajes, en especial cuando todo sale mal. Aunque la fiesta es el recinto por excelencia del placer, cada fiesta es un fracaso y un vacío, no hay nada detrás del celofán y el autor lo rompe, tal vez con algo de morbo.

Quizá el último sorbo en este Guetto es la soledad, la cual podremos encontrar en el odontólogo, bajo la lluvia o en un estado de apatía que limita con la anemia, son tres versiones de la misma, que se exponen como momentos en una línea, pero son historias aparte, tan lejanas la una de la otra que sospechar la coincidencia entre todas es ingrato y paranoico.

En todo esto nos hallamos ante la representación de un libro singular y próximo, actual al punto de la inmediatez, crítico de forma inconsciente, lúdico desde el contraste, invariablemente perteneciente a nuestro tiempo y a nuestra tierra, este inmenso Guetto tropical.